domingo, 15 de septiembre de 2013

La joven disfrazada de cuero

Todos quedaron impresionados tras escuchar de Anne Jonson aquellas palabras tan llenas de sentimiento; tan pulcras y sinceras.

Esta chica de cuidad mostraba siempre un carácter estándar, uniforme, estereotipado. Para ser más exactos  todos los que creían conocerla tenían la certeza  de que Anne era incapaz de mantener una simple conversación seria.

Mostraba siempre una actitud desenfadada ante la vida,  como si nada importase más allá de los dos seguidos siguientes a ese mismo instante, como si el mundo terminase tras cada latido.

Anne es esa clase de mujer que visita una cama diferente cada noche, que recorre todos los bares de la cuidad, Anne es la perfecta amiga de copas, pero nada más. Una persona con un trabajo estándar, un piso estándar, unos amigos, una familia y en general; una vida estándar.


“A una mujer no se la liga, a una mujer se la enamora, ignorantes”


El rostro de los presentes cambió por completo de una amplia y casi burlona sonrisa a caras de asombro. Anne permaneció sería durante unos treinta incómodos minutos, asco seguido exhaló y se dirigió hacia la puerta marcando su triunfal salida con un portazo.
Este fue el principio de la desnudez de la brillante Anne Jonson.

No hay comentarios:

Publicar un comentario